Operación ‘Tindra’: todo lo que la Guardia Civil ha averiguado sobre ‘El Melillero’ y su red criminal

Con la última detención del presunto coautor del ataque con ácido a dos jóvenes en Cártama (Málaga), la Guardia Civil da por cerrada la operación ‘Tindra’. El conocido como ‘El Poti’, arrestado el pasado 10 de marzo, presentaba al parece heridas por ácido que le involucraban en los hechos.

El susodicho cuenta con un amplio historial delictivo y ha pasado ya varios años en prisión por delitos anteriores. Aún así, seguía en busca y captura por amputar la mano a una persona. Los investigadores apuntan a que es, junto a ‘El Melillero’, uno de los dos presuntos autores materiales de la agresión, si bien este último sería el autor intelectual e instigador de la misma.

La operación ‘Tindra’ -en alusión a las víctimas, Cristina y Sandra- se cierra tras dos meses de investigación con un total de once arrestos, ocho de los cuales se encuentran ya en prisión provisional. Todos ellos son presuntos integrantes de un entramado criminal dedicado, entre otros delitos, a robar droga a traficantes.

Este operativo está íntimamente ligado a la operación ‘Dubrovnik’, iniciada el pasado año.

Operación ‘Dubrovnik’

Las pesquisas apuntan a que ‘El Melillero’ se valió presuntamente de su organización para perpetrar el ataque. En noviembre de 2020, fuerzas en servicio del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Marbella advirtieron movimientos extraños en torno a un camión cisterna que circulaba por la AP-7, observando cómo varios individuos intentaban asaltarlo.

Al verse sorprendidos por los agentes, abortaron la maniobra y se dieron a la fuga en varios vehículos. Los guardias civiles comprobaron que la cisterna contenía 282,5 kilos de hachís y 124 kilos de marihuana, por lo que detuvieron al conductor.

Tras esto, se inicia la investigación en la operación ‘Dubrovnik’ – ya que al parecer esta localidad croata era el destino final de la droga intervenida- con el fin de identificar la organización que pretendía dar el ‘vuelco’, es decir, robar mercancía a narcos.»Estas organizaciones suelen ser muy violentos», han apuntado.

Así, fueron identificados los integrantes de un activo grupo criminal asentado en Mijas y Fuengirola.

12 de enero, ataque con ácido

Iniciada esta investigación, el día 12 de enero se produce el ataque con un bote de ácido sulfúrico a dos jóvenes en Cártama. Tras esta agresión, los agentes supieron que un día antes, ‘El Melillero’ se había acercado al vehículo de la que había sido su novia, sin que ésta bajase la ventanilla, por lo que se fue.

El día de los hechos, «con extraña habilidad para localizarlas», las dos jóvenes estaban en el coche de Sandra cuando se encontraron de nuevo con él y esta vez sí, con la ventanilla abierta, de forma que éste y la persona que le acompañaba, luego identificado como ‘Poti’, supuestamente arrojan un bote de ácido dentro del vehículo, afectando a ambas chicas, con mayor gravedad a Sandra, ex pareja de ‘El Melillero’.

Los investigadores iniciaron indagaciones para identificar al autor o autores de «estos despiadados» hechos. Desde el primer momento y por las declaraciones de los testigos, se identifica a los presuntos autores como ‘El Melillero’ y el ‘Poti’, que habían huido del lugar y estaban en paradero desconocido.

GPS oculto en el coche de las víctimas

En cuanto a la localización y detención de los autores, inmediatamente se comprueba que ambos están relacionados con las personas incluidas en la operación ‘Dubrovnik’, lo que implica que supuestamente «tienen una organización criminal detrás y confirma la extrema violencia con la que actúan».

En la inspección de los vehículos de las víctimas, los agentes detectan que les habían instalados dispositivos de geolocalización para saber el lugar exacto donde en el que se encontraban en cada momento, presuntamente instalados por esta organización criminal.

Los agentes investigaron también cómo y dónde adquirieron el ácido y encontraron la trazabilidad del bote empleado, al igual que accedieron a audios en los que ‘El Melillero’ hablaba sobre su exnovia «refiriéndose a su belleza, a su cara bonita». Esto, junto con otros detalles, se comprobó uno a uno para aportarlo al juzgado, indicando que «podría apuntar a una presunta premeditación y ensañamiento».

Asimismo, en el curso de la investigación se comprobó que los hábitos de los miembros del grupo de la operación ‘Dubrovnik’ habían cambiado, contemplando la posibilidad de que usaran sus medios habituales para introducir de drogas en España, con embarcaciones de gran potencia, para intentar escapar del país tras el ataque.

Esta organización, «con mucha experiencia en la realización de actividades delictivas», complicó la actuación de los investigadores al igual que el gran parecido físico de ‘El Melillero’ con uno de sus hermanos.

Así, uno de los agentes identifica a ‘El Melillero’ cuando circulaba con una moto junto con otros miembros de la organización en la zona de Entre Ríos de Mijas. Para evitar que fuera detenido, los acompañantes no dudaron en embestir con sus motos a los vehículos de la Guardia Civil que llegaron a sufrir un accidente.

Los presuntos implicados se dieron a la fuga y ante la posibilidad de que se escondieran en un lugar cercano, se realizó una batida en el área. Además, se emplearon otras medidas de investigación que indicaron la posibilidad de que la huída por esa zona no era casual, sino que podía estar escondiéndose en una finca cercana donde era auxiliado por otros componentes de la organización.

Poco después, se pudo comprobar cómo efectivamente ‘El Melillero’ estaba escondido en el anexo a la vivienda sospechosa, y fue detenido sin oponer resistencia, «sin duda por el despliegue existente». En el registro se encontró enterrado más de 50.000 euros en efectivo «para la disponibilidad inmediata del principal sospechoso».

Esa misma noche se inició también la explotación de la operación ‘Dubrovnik’, arrestando a los supuestos miembros de la organización identificados, tanto por su relación con el ‘vuelco’ del camión como por la ayuda a ‘El Melillero’ para esconderse. Entre ellos estaba su hermano.

Registros y detenciones

Se realizaron un total de cuatro registros y se detuvieron a ocho personas y un investigado por presuntamente participar en la preparación de los hechos y por encubrir y/o facilitar la huida de los autores materiales de la agresión y por pertenencia a organización criminal. En los registros fueron intervenidos 62.000 euros en efectivo.

Tras esto, los investigadores se centraron en localizar al otro supuesto implicado directamente en los hechos, uno de los dos presuntos autores materiales del ataque a las dos chicas, conocido como ‘Poti’. Éste, que había pasado varios años en la cárcel por otros hechos, había amputado la mano a una persona y estaba pendiente de ser detenida para poder ser puesta a disposición judicial.

Al verse perseguido, prácticamente desapareció, pero los agentes vigilaron todo su entorno en Fuengirola y Mijas y fue detectado el día 10 de marzo en un inmueble de Las Lagunas. Tras tener el mandamiento judicial, lo detuvieron, con lo que la Guardia Civil da por cerrada la operación ‘Tindra’.

A los detenidos de la operación ‘Dubrovnik’ se les imputan los delitos de organización criminal y encubrimiento; mientras que a los supuestos autores materiales se les investiga por dos delitos de asesinato en grado de tentativa, uno de ellos en el marco de Violencia de Género.

El juzgado de Violencia sobre la Mujer número 3 de Málaga y el de Instrucción número 2 de Fuengirola son los que llevan las causas, el primero por los intentos de asesinatos y el segundo por la investigación de la organización criminal dedicada al narcotráfico.

Esta operación ha sido desarrollada la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, con el apoyo de otras unidades como OCON-SUR, Grupo de Acción Rápida (GAR), Unidad Central Operativa (UCO) y el Servicio Aéreo (UHEL), llegando a intervenir simultáneamente más de 200 agentes.